Los bosques animales
Las densas comunidades de algas, de plantas marinas y de animales proporcionan una estructura tridimensional que sirve de hábitat a numerosas especies que se mueven, algunos de estos organismos se desplazan más lentamente, como los erizos o las babosas de mar; y otros, como los cangrejos o los estomatópodos andan y nadan con rapidez. Los organismos móviles encuentran alimento como refugio en los bosques marinos. A menudo, se trata de organismos con dietas bastante especializadas, de modo que los encontraremos asociados a unas comunidades concretas. Algunos de los organismos móviles que viven asociados al fondo del mar, como numerosos peces, presentan coloraciones miméticas con el fondo, hecho que les permite pasar desapercibidos a ojos de depredadores y/o presas. a pesar de que las comunidades bentónicas suelen proporcionar hábitat para muchos organismos, a menudo la competencia por el espacio es también feroz. Por ello numerosos organismos se asocian a otros para compartir el mismo espacio. Estas asociaciones pueden ser de distinto tipo.
A veces viven en beneficio mutuo, o en beneficio de uno de ellos.
Las fuentes hidrotermales submarinas son lugares donde se desarrollan comunidades bentónicas peculiares. Estas fuentes se encuentran a menudo cerca de las dorsales oceánicas, a grandes profundidades, y de ellas emana agua caliente muy rica en minerales que precipitan en contacto con el agua fría del fondo del mar. A su alrededor se establecen comunidades animales dominadas por gusanos gigantes —pueden llegar a medir hasta 2 m de largo y viven en simbiosis con bacterias que les proporcionan alimento—, y determinadas especies de mejillones, almejas, pulpos, cangrejos y camarones. La mayoría de estos animales viven asociados, o bien se alimentan de microorganismos, como bacterias que son capaces de aprovechar los minerales y sustancias contenidos en el agua de las fuentes para producir materia orgánica; por lo tanto, son organismos quimiosintéticos.